Un tiroteo deja al menos 16 fallecidos y decenas de heridos
En Estados Unidos se ha registrado más de 500 tiroteos masivos en lo que va recorrido este año
En una serie de violentos tiroteos en la ciudad de Lewiston, Maine, al menos 16 personas han perdido la vida y, según informes, entre 50 y 60 han resultado heridas. La noticia fue confirmada por las cadenas CNN y CBS.
El sospechoso, identificado como Robert Card, de 40 años, ha sido vinculado a los ataques a varios negocios en la ciudad, incluyendo una sala de bolos, Sparetime Recreation, y un restaurante llamado Schemengees Bar & Grille, así como un centro de distribución de Walmart. Card, descrito como "una persona de interés" por las autoridades, sigue en paradero desconocido. La policía ha advertido al público que lo consideren armado y extremadamente peligroso.
El Departamento de Seguridad Pública de Maine instó a los ciudadanos a permanecer en sus hogares, manteniendo todas las puertas cerradas. Además, la oficina del sheriff distribuyó imágenes del sospechoso, mostrando a Card sosteniendo un rifle de asalto.
A pesar de los informes iniciales sobre el número de víctimas, el comisionado de seguridad de Maine, Mike Sauscuch, no confirmó la cifra exacta en una conferencia de prensa. Sin embargo, informó que se había localizado un vehículo que presumiblemente pertenece al sospechoso.
Sobre Robert Card
El perfil del sospechoso revela un pasado tumultuoso. Robert Card es un sargento retirado del Ejército de Estados Unidos, con experiencia como instructor de tiro y experto en armas. Se descubrió que tenía antecedentes penales, incluidos arrestos por violencia doméstica, se ha divorciado dos veces, es padre de tres hijos.
Además, una de sus exesposas había obtenido anteriormente una orden de alejamiento contra él. Más inquietante aún es que, a principios de este año, Card había informado sobre problemas de salud mental y había emitido amenazas relacionadas con un ataque en una base militar en Saco, Maine.
La búsqueda sigue en curso
Las autoridades continúan su búsqueda y se esfuerzan por brindar asistencia a las víctimas y garantizar la seguridad de la comunidad. La tragedia ha dejado a Lewiston, una ciudad que normalmente disfruta de la tranquilidad, en estado de shock y luto.
