Ismail Haniyeh, destacado líder político del movimiento islamista palestino Hamás, fue asesinado junto a uno de sus guardaespaldas. La Guardia Revolucionaria de Irán confirmó el ataque a la residencia de Haniyeh ubicada en la capital iraní, Teherán, donde ambos perdieron la vida.
Diversas agencias iraníes informaron sobre el asesinato, señalando la gravedad del evento que ha conmocionado a la región y a la prensa internacional. La acusación directa de Hamás apunta hacia Israel, responsabilizándolos del ataque mortal.
Haniyeh, quien lideraba las operaciones políticas de Hamás desde su exilio en Qatar, fue un influyente dirigente en la resistencia palestina.
El New York Times reportó la acusación de Hamás, subrayando la tensión creciente en la región tras este ataque. En un comunicado emitido por la Guardia Revolucionaria de Irán, se mencionó: "La residencia de Ismail Haniyeh, jefe de la oficina política de la Resistencia Islámica Hamás, fue atacada en Teherán y, como resultado de este incidente, él y uno de sus guardaespaldas fueron martirizados".
Este hecho marca un punto crítico en el conflicto de Oriente Medio, aumentando las tensiones entre Irán e Israel, y dejando un vacío en la dirigencia de Hamás que podría tener repercusiones significativas en la política de la región.