El pasado sábado 2 de noviembre, una estudiante de la Universidad Islámica Azad en Teherán, identificada posiblemente como Ahou Daryaei, protagonizó una protesta singular que culminó en su arresto por fuerzas de seguridad iraníes. Según informes de la plataforma Amirkabir Newsletter, la joven había enfrentado acoso constante por parte de la milicia paramilitar Basij debido a su negativa a usar el hijab, un requisito impuesto por la estricta ley islámica del país.
El incidente se desencadenó cuando un miembro de la milicia intentó arrancarle la ropa durante un altercado. En respuesta y como acto de protesta, la estudiante se despojó de su ropa hasta quedar en ropa interior y caminó por el campus de la Sección de Ciencias e Investigación de la universidad.
Testigos relatan que, poco después, agentes de seguridad vestidos de civil la interceptaron, golpearon y la arrastraron a un coche. Según Amirkabir Newsletter, la joven sangraba visiblemente durante el arresto y fue llevada posteriormente al Hospital Psiquiátrico de Teherán.
Amnistía Internacional, a través de su filial Amnistía Irán, condenó el arresto y exigió su liberación inmediata e incondicional. Además, solicitó una investigación independiente sobre las denuncias de violencia física durante la detención de la joven.
La situación recuerda la trágica muerte de Jina (Mahsa) Amini en 2022, quien fue arrestada por no cumplir con el código de vestimenta y cuyo fallecimiento provocó una ola de protestas en favor de los derechos de las mujeres iraníes y el lema “Jin, Jiyan, Azadî” (Mujer, Vida, Libertad).
Por su parte, la agencia iraní Fars informó que la estudiante vestía ropa “inapropiada” y afirmó que los agentes de seguridad le hablaron “con calma” antes del incidente, negando cualquier agresividad en su proceder.
No obstante, la versión difundida por testigos y grupos de derechos humanos contradice esta declaración, subrayando la gravedad de la situación y el uso desproporcionado de la fuerza por parte de las autoridades.
Se espera que en los próximos días surjan más detalles y reacciones sobre este caso que vuelve a poner de manifiesto las tensiones sobre la aplicación de las estrictas normas de vestimenta en Irán y el papel de las mujeres en la lucha por sus derechos.