Sérgio Bomba muere en un quiosco mientras compartía con su enamorada
El fallecido criminal había logrado evadir un ataque a su integridad el día anterior a este incidente
En una noche manchada por un crímen en Recreio dos Bandeirantes, Río de Janeiro, Brasil, Sérgio Rodrigues da Costa Silva, también conocido como Sérgio Bomba, fue asesinado en un quiosco mientras compartía momentos con su novia.
Las impactantes imágenes captadas por una cámara de seguridad revelan el momento exacto en que un hombre se acerca con una pistola en mano y, en menos de 20 segundos, dispara varios tiros a quemarropa, acabando con la vida de Sérgio de manera instantánea.
Sérgio Bomba, previamente detenido en 2017 en la Operación Horus, había sido designado líder de la milicia en Sepetiba. La milicia bajo su comando se dedicaba a cobrar impuestos a residentes y comerciantes, apropiarse de tierras y clonar vehículos robados.
La violencia no era ajena a su vida, ya que los testigos informaron que escapó de un ataque apenas un día antes del fatídico suceso.
El Grupo Especializado de Acción y Combate al Crimen Organizado (Gaeco) del Ministerio Público investiga la participación de Sérgio en la milicia de Sepetiba. Rui Paulo Gonçalves Estevão, también conocido como Pipito, surge como el principal sospechoso detrás de la ejecución. Pipito, según las investigaciones, busca tomar el control de la milicia tras la rendición de Luiz Antônio da Silva Braga, alias Zinho, en diciembre.
Sérgio Bomba, quien trabajó como miliciano en Sepetiba durante más de una década, incluyendo su colaboración con la familia Braga, se unió a la banda de Zinho. Sin embargo, las últimas investigaciones sugieren que aspiraba a formar su propia milicia en la región, lo que pudo haber desencadenado la violenta lucha por el control del territorio.
