El inicio del cese al fuego del ELN se vio empañado por una impresionante balacera en Fortul, Arauca. En la noche del 5 de julio, se reportó un hostigamiento armado en el municipio, específicamente contra la estación de Policía de la localidad en la zona fronteriza con Venezuela. Este ataque, presuntamente perpetrado por el grupo insurgente del ELN, sorprendió a pesar del anuncio de cese de hostilidades contra la Fuerza Pública.
Según un comunicado emitido por la Estación de Policía de Fortul, aproximadamente a las 8:15 p.m., los uniformados fueron objeto de ráfagas de fusil durante unos 10 minutos. Sin embargo, gracias a la activación del Plan de Defensa de la unidad, lograron repeler el ataque armado. Afortunadamente, no se registraron heridos ni víctimas mortales entre los policías, pero se está verificando si algún civil resultó afectado durante la incursión, en la que se emplearon armas de fuego y artefactos explosivos.
Uno de los videos más impactantes que circulan en las redes sociales es el de una cámara de seguridad de un gimnasio, donde se puede observar cómo las personas presentes se lanzaron al suelo para protegerse de los disparos en la zona. Incluso, se escucha a una menor de edad entrar en pánico, ya que el ataque armado ocurrió mientras grababa a una de las mujeres que se ejercitaba.
Este incidente se suma a la complicada situación de orden público en Arauca, donde se confirmó el secuestro de una suboficial del Ejército Nacional y sus dos hijos menores de edad. La sargento Gihislaine Karina Ramírez Chitiva y sus dos hijos de seis y ocho años, uno de ellos con autismo, fueron secuestrados mientras viajaban en automóvil hacia el municipio de Arauca. Las autoridades militares están investigando los hechos y hasta el momento se desconoce su paradero.
La situación en Arauca sigue siendo desafiante y se espera que las autoridades tomen las medidas necesarias para garantizar la seguridad de la población y dar con el paradero de los responsables de estos actos violentos.